En estos momentos complicados, pensamos que es importante tener las flores muy a mano. Es un momento de reflexión y, como toda crisis, se abre una posibilidad de importantes cambios internos. Conviene recordar, además, que para el Dr. Bach el miedo era «El Gran Carcelero», y que no hay que confundir prudencia con pánico.
Las flores más adecuadas son, a nuestro entender, las siguientes:
🔹 Crab Apple: limpieza y purificación.
🔸Rock Rose: Pánico.
🔹Aspen: Miedo a lo desconocido, a un futuro incierto.
🔸Cerato y Walnut: Para no dejarse influir totalmente por las opiniones externas y para que prevalezca en nosotros el sentido común y la intuición. La segunda para mejorar nuestra adaptación a los cambios rápidos que habrán.
🔹Centaury: Para poner límite (virus, bombardeo de información, alarmismo).
🔸White Chestnut: Para evitar estar pensando en lo mismo todo el tiempo
🔹Wild Oat y Sweet Chestnut: Según cada caso, pueden ayudar a replanteamientos vitales.
Puede que en algunos casos sea necesario:
🔸Gorse, si la situación se prolonga demasiado y no vemos salida, o como mínimo Gentian para el desánimo y el pensamiento negativo.